ATMA es una guerrera que tras perder una batalla aparece casi muerta en el bosque. Olvidada por su ejército, decide abandonar la armadura, que ha protegido su cuerpo, e inicia el camino que la llevará a la rendición final, a la victoria.
Entre la narración y la performance, Carla Subirana ilustra una metáfora de empoderamiento a través de una luchadora herida que, tras despojarse de su armadura, vuelve a la vida y toma el control de su cuerpo.
El despertar de la guerrera
«Subirana reaparece ahora con este corto que la reinventa, que la sitúa en el disparadero como si empezaran otra vez.
Esta capacidad para reiniciar o cambiar temporalmente una trayectoria deberá contarse, pues, entre las habilidades del cine española actual».
Carlos Losilla – Caimán Cuadernos de Cine.